La gestión de procesos implica mirar las organizaciones de una manera distinta a como se hace con la división del trabajo tradicional. Pone atención en las actividades, pero con un foco en la integración y en las relaciones entre ellas.
Toda organización, cualquiera sea su naturaleza, debe entregar sus productos y/o servicios de manera eficaz y eficiente.
La eficacia está relacionada con el cumplimiento de los objetivos que se han propuesto (por ejemplo, productos determinados y con ciertos fines, y de calidad). En cambio, la eficiencia está asociada al mejor uso de los recursos (económicos, materiales, tecnológicos, etc.). Esto es una constante y es parte inherente de la función de administración.
Lo anterior significa un desafío permanente, primordialmente para quienes están a cargo de la dirección de una organización, pero asimismo para todos sus integrantes (pues las políticas y acciones en calidad deben estar correctamente desplegadas), lo que…
...¿Te gustó? Inscríbete a nuestro newsletter