Los momentos que vivimos ponen a prueba a las organizaciones. Dos fuerzas —consolidación y cambio— son la constante que deben superar. Todo ello con el fin de tener éxito ante las nuevas condiciones del mundo actual, más allá de la pandemia.
Cada momento histórico, cada nueva ola de conocimiento y de posibilidades, ha traído consigo tipos de organizaciones que prueban ser funcionales en ese contexto, generando desarrollo económico, prosperidad y difusión cultural para las prácticas que ese conocimiento conlleva.
Este mecanismo evolutivo (nuevos tipos de organizaciones surgiendo para nuevos contextos) ha tenido luces y sombras. Las luces apuntan a mejores resultados, formas de escalar de manera sostenible la capacidad organizacional, gran cobertura e impacto. Las sombras están relacionadas con la despersonalización, falta de compromiso con el ambiente, dilemas éticos, estrés, entre otros.
La sombra: que la misma fórmula sirva para siempre
Todas estas sombras han ocurrido en…
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